Me gusta traer a mi blog aquellos temas que surgen de los comentarios como el de PatRio, sobre todo porque aunque viejitos, éste que ahora coloco aqui, lo escribió mi hermano en su Blog Trascendencias , en octubre 2007 para ser exactos y hacer honra al escritor....
Primero debo agradecer todos sus comentarios, los leo cada uno porque aportan al principio que rige este blog, así tenga que ser anónimo bien sea por resistencia a procesos de registros fastidiosos o por principio de personalidad.
Uno de estos comentarios se desprendió del tema anterior y se refería al proceso que como mujer para conseguir su príncipe azul tenía que seguir besando sapos.
Pues la misma autora Rosetta Forner, tiene un libro titulado La Reina que le dio Calabazas al Caballero de Oxidada Armadura, el cual es un intento en tenderle una mano a la mujer para que logre alcanzar “lo que sueña”, el príncipe azul que todas quieren tener al lado, por cierto la autora no lo llama príncipe, lo llama rey.
Es que en todas aquellas mujeres que sienten aún no ha llegado a sus vidas el príncipe azul hay una historia confesable de amor perdido, traicionado, hallado, soñado, sentido, ignorado y/o aprendido. Lo importante en cada experiencia es aprender y así crecer.
Forner habla de dos tipos de mujeres: las reinas y las damiselas de floja diadema. En la corona, hay una máxima dice que para tener a un rey primero hay que ser reina porque ningún rey quiere a una damisela y viceversa, si quieren a una reina hay que ser rey, de lo contrario es mejor apartarse del camino.
Para encontrar al rey hay que tener paciencia y no andar besando sapos, la reina no debe quitarse la corona para parecer menos alta y así el caballero de armadura demasiado oxidada no se sienta incómodo en su estatura junto a ella.
He escuchado en muchas mujeres la expresión que dice “vive del equivocado hasta que llegue el indicado”, y esa frase a decir verdad no es digna de una mujer. Una reina siempre tiene por compañía su dignidad, esto le hace apostar por ella misma, la reina ama, pero también se ama a sí misma
Esa dignidad es la causante de que acepte el dolor de las rupturas, de los sueños rotos, y opte por dedicarse a la recuperación de sus heridas y a cuidar de su corazón en vez de lanzarse a los brazos de un caballero de armadura demasiado oxidada suplicando clemencia (léase: "no me dejes"), cito del libro:
"Para poder dar amor del bueno, para poder amar incondicionalmente, primero habrás tenido que independizarte emocionalmente, lo cual equivale a “amar a corazón abierto”, con toda la integridad y honestidad de tu alma, y la valentía y coraje suficientes como para largarte de la relación si la otra persona te traiciona, deja de amarte o no te ama con la calidad de amor que tu alma y nivel de conciencia requieren.
Amar a un rey no es cualquier cosa: no finge, no miente, no espera, no manipula, no engaña, no tergiversa, no te dice lo que quieres oír sino lo que siente o piensa, va a su aire pero cuenta contigo, te hace preguntas directas pues quiere saber si la relación tiene posibilidades.”Hay caballeros guapos, de esos que gusta mirar, pero con un corazón tan vacío que da miedo asomarse a su vida. No tienen intención alguna de quedarse en la tuya, por la sencilla razón de que para eso han de comprometerse contigo, y eso significa tener que renunciar a todas las damiselas de diadema floja que pululan a su alrededor dispuestas a consolarles las noches de soledad y a aguantarle todas sus salidas de tono.
Suele tratarse de hombres con pánico a amar, huidizos del compromiso del corazón, que no harán sino dejar el tuyo maltrecho si se te ocurre asirte a ellos, si te callas porque no quieres que se asuste o pienses que le presionas o vas demasiado deprisa o que estás desesperada o más comprometida que él en la relación, si en vez de pensar en ti piensas sólo en él lo más probable es que te lleves un chasco, acabarás por descubrir que "lleváis velocidades diferentes", un eufemismo que significa que mientras tú pensabas que ambos estabais construyendo una relación, él estaba pasando el tiempo y entreteniéndose contigo hasta que llegase otra que le gustase más con tal que no tuviese que comprometerse ni le diese la vara.
No te quedes esperando que tu caballero se convierta en rey, lárgate y vive tu vida, si lo hace ya lo hará y si es tu rey ya se verá, cada uno elige su camino y su momento.”
Hay una reflexión que me llegó hace poco y que encaja perfectamente con este humilde aporte para que la mujer sea cada día una mejor mujer y el hombre mejor hombre:“Para tener la pareja ideal primero debemos convertirnos en el ideal que buscamos, entender que somos especiales y que merecemos a alguien que nos respete y quieran tanto como se está dispuesto a entregar.”
Las mujeres por naturaleza son trascendentales, en consecuencia, fíjense bien su corona y que jamás se les caiga que llegó la hora de dejar de andar besando sapos." JcMarre...
Me gustó muchisimo el escrito...y hubo frases que de alguna manera me hicieron reflexionar sobre mi vida...tanto que me tarde en poder ordenar las ideas para poder hacer algún tipo de comentario...cuando más jóven...de alguna manera suplicaba el "no me dejes"...ahora miro hacia atrás y digo Diooss!!...como pude...aunque en ese momento era lo que pedia...ya pasó...y la otra...que de alguna manera deje de mirar mi vida...para mirar la del otro...y ahora...que han pasado 17 años desde ese "no me dejes"...siento que ya es hora de mirarME...sentirME...escucharME...Es sólo una reflexión....
ResponderEliminarQue bueno que reflexionaste, también yo, ya de esto van a ser casi 10 años, y si, me dedique a lo que mencionas MirarMe, SentirMe... gracias por tu comentario,
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