"Mami, papí, para que me mires, yo me enfermo y hago lo que sea por ti"
Este es el amor ciego que me une, me hace leal, y me permite pertenecer..
"La benevolencia que cura:
Nuestra benevolencia proviene de lo más recóndito, del fondo de nuestra alma; nace donde ésta se siente acorde con su origen. Este origen es la fuente de toda fuerza creadora y de su aspiración a evolucionar. Esta benevolencia abarca pues a todos los seres y todas las cosas. Es universal. En el momento que queremos excluir algo de nuestra benevolencia, perdemos nuestro vínculo con ella y corremos el riesgo de volvernos presuntuosos y condescendientes.La benevolencia universal no tiene intención. Mantiene una distancia, como el sol que brilla a lo lejos y al mismo tiempo da calor a todo lo que existe.
¿Dónde podemos experimentar primero esta benevolencia?
En nuestro cuerpo.
¿De qué manera podemos ayudar al cuerpo cuando está enfermo o siente dolor?
Mostramos todo lo que nos duele a nuestra benevolencia y dejamos que su sol brille sobre todo lo que sufre, hasta que nos sintamos bien de nuevo. Nuestra benevolencia nos acoge y ama tal como somos." Bert Hellinger
0414-438.19.90
Faciitadora: Zhair Marrero
No hay comentarios:
Publicar un comentario