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Este blog va tomando su curso solo, basado en un inicio que marca su trayectoria: “mi proceso personal” como yo lo denomino, porque en sí, mi vida “Es un Proceso Personal”, así que pro mover vida, significa, mirar lo que sigue su curso. Pero el tema de las palabras no va por ahí…
Inicié el tema de las palabras en mi niñez, según cuenta mi abuela Tacha, me iban a matar un chuchube(*) en la cabeza porque a los dos años aún no hablaba (se que ella desde el cielo se debe estar riendo porque ahora hablo demás), asi crecí, conversando con ella, aún hoy en día uso muchas frases de ella, una amiga un día me dijo que yo era folklórica en un taller, y lejos de sentirme mal, le di las gracias porque me permitió reconocer en mi, el lenguaje llano que aprendí estando con ella quien me cuidaba mientras mi mamá estaba trabajando hasta tarde en la noche para sostenernos.
Y un día hablé clarito, casi a los dos años y medio (según ella antes solo emitía soniditos y era muy silenciosa). Asi comencé mi camino por el mundo de las palabras, luego cuando mi mamá se dio cuenta, me enseñó los libros de cuentos, y a los cuatro años ya estaba en la escuelita de la Srta. Alicia en Charallave, en la calle Ramón Figuera, aprendiendo cómo se escribían las palabras.
Me encantaban los cuentos, aún me gustan, y sobre todo contarlos…
Así fui creciendo y amé la historia como un cuento, me gusta leer y mucho, me “como” a veces un libro en una noche.
Un día encontré en medio de un curso de mediación en Santa Fé, Argentina, La Programación Neuro Lingüística, en una pequeña introducción en el ámbito de los mediadores, y cuando llegué a Caracas, por el año de 1998, me puse a buscar quién hacía estos cursos. Me topé con muchos, pero ninguno me dio el feeling que había sentido cuando hice ese introductorio, ninguna persona me llegaba a ese nivel profundo del folklore interno en mi baile de las palabras…
Y en un acto medio extraño, tuve que compartir en la tragedia de la Guaira en diciembre del 99, una tarde de radio (Radio continente) y de mensajes para localizar personas en un voluntariado en medio de todo el dolor, con un hombre con quien sentados frente a un teléfono, recibíamos los mensajes de las personas perdidas o de sus familiares y los ayudábamos a encontrarse. Ese hombre se llama Lenín Wilhelm, quien al final de la noche, cansados y ya nos íbamos cada quien a sus casas, se presenta como el director del Instituto Venezolano de PNL… hice como Condorito, luego de casi dos años de búsqueda me había encontrado a quien me ofrecía el folklore de las palabras!!!
Demás está decir que soy su fans, hice todos los niveles practitioner, master y trainer, y además nos fuimos con el IVPNL a ver a Richard Bandler en México siendo los primeros 5 Trainers formados por el creador de la Estructura de la Magia de las palabras.
Hoy por hoy, aunque llevo un programa de “El Arte de la PNL aplicada en forma terapéutica”, mi honra a su trabajo, y esta es una manera de decirle que es parte de mi folklore personal. (En la primera página de mi manual, se encuentra la historia)
Creo que el significante (conjunto de letras que conforman una palabra) no dice todo el significado (interpretación de la palabra) que dentro de nosotros “vive” la palabra.
Las palabras hablan de nuestro mundo interno, dicen más de lo que queremos decir, sobre todo cuando alguien dice cosas que “le salen” sin darle importancia alguna, es cuando más afectan al que las recibe.
Palabras dichas al azar, es ir pasando la vida sin que ella pase por ti, sin disfrutar de los significados internos y la belleza de lo que vas construyendo en tu interior.
Este post es una invitación a pensar las palabras, quizás tartamudeemos cuando comencemos a tomar esa conciencia, es respirar y entrar en nuestro mundo de sentimientos, emociones, imágenes internas, y dejar que emerjan desde adentro…
Su etimología, el lugar donde coloco el sujeto o el verbo en la oración… semántica, sintaxis, no es lo mismo decir en Dominicano: ¿Cómo tu ta?, que decir en Venezolano ¿Cómo’stas?... en una el sujeto es explicito que se dirigen a mi, a mi persona, a mi interior, y en otra me omiten y me apostrofean para pasar a ser “educados” pero desconectados de lo interno…
Felíz semana de significados y significantes!!!
(*)Chuchube: conocida como Paraulata, pajarito que canta mucho y que le gusta las zonas áridas y los cujíes son sus preferidos para posarse a cantar. Lo mencionan en varias canciones: ..y un chuchube modula un cantar….demás está decir que mi abuela es de Carora, “donde los cujíes lloran de dolor”…
Inicié el tema de las palabras en mi niñez, según cuenta mi abuela Tacha, me iban a matar un chuchube(*) en la cabeza porque a los dos años aún no hablaba (se que ella desde el cielo se debe estar riendo porque ahora hablo demás), asi crecí, conversando con ella, aún hoy en día uso muchas frases de ella, una amiga un día me dijo que yo era folklórica en un taller, y lejos de sentirme mal, le di las gracias porque me permitió reconocer en mi, el lenguaje llano que aprendí estando con ella quien me cuidaba mientras mi mamá estaba trabajando hasta tarde en la noche para sostenernos.
Y un día hablé clarito, casi a los dos años y medio (según ella antes solo emitía soniditos y era muy silenciosa). Asi comencé mi camino por el mundo de las palabras, luego cuando mi mamá se dio cuenta, me enseñó los libros de cuentos, y a los cuatro años ya estaba en la escuelita de la Srta. Alicia en Charallave, en la calle Ramón Figuera, aprendiendo cómo se escribían las palabras.
Me encantaban los cuentos, aún me gustan, y sobre todo contarlos…
Así fui creciendo y amé la historia como un cuento, me gusta leer y mucho, me “como” a veces un libro en una noche.
Un día encontré en medio de un curso de mediación en Santa Fé, Argentina, La Programación Neuro Lingüística, en una pequeña introducción en el ámbito de los mediadores, y cuando llegué a Caracas, por el año de 1998, me puse a buscar quién hacía estos cursos. Me topé con muchos, pero ninguno me dio el feeling que había sentido cuando hice ese introductorio, ninguna persona me llegaba a ese nivel profundo del folklore interno en mi baile de las palabras…
Y en un acto medio extraño, tuve que compartir en la tragedia de la Guaira en diciembre del 99, una tarde de radio (Radio continente) y de mensajes para localizar personas en un voluntariado en medio de todo el dolor, con un hombre con quien sentados frente a un teléfono, recibíamos los mensajes de las personas perdidas o de sus familiares y los ayudábamos a encontrarse. Ese hombre se llama Lenín Wilhelm, quien al final de la noche, cansados y ya nos íbamos cada quien a sus casas, se presenta como el director del Instituto Venezolano de PNL… hice como Condorito, luego de casi dos años de búsqueda me había encontrado a quien me ofrecía el folklore de las palabras!!!
Demás está decir que soy su fans, hice todos los niveles practitioner, master y trainer, y además nos fuimos con el IVPNL a ver a Richard Bandler en México siendo los primeros 5 Trainers formados por el creador de la Estructura de la Magia de las palabras.
Hoy por hoy, aunque llevo un programa de “El Arte de la PNL aplicada en forma terapéutica”, mi honra a su trabajo, y esta es una manera de decirle que es parte de mi folklore personal. (En la primera página de mi manual, se encuentra la historia)
Creo que el significante (conjunto de letras que conforman una palabra) no dice todo el significado (interpretación de la palabra) que dentro de nosotros “vive” la palabra.
Las palabras hablan de nuestro mundo interno, dicen más de lo que queremos decir, sobre todo cuando alguien dice cosas que “le salen” sin darle importancia alguna, es cuando más afectan al que las recibe.
Palabras dichas al azar, es ir pasando la vida sin que ella pase por ti, sin disfrutar de los significados internos y la belleza de lo que vas construyendo en tu interior.
Este post es una invitación a pensar las palabras, quizás tartamudeemos cuando comencemos a tomar esa conciencia, es respirar y entrar en nuestro mundo de sentimientos, emociones, imágenes internas, y dejar que emerjan desde adentro…
Su etimología, el lugar donde coloco el sujeto o el verbo en la oración… semántica, sintaxis, no es lo mismo decir en Dominicano: ¿Cómo tu ta?, que decir en Venezolano ¿Cómo’stas?... en una el sujeto es explicito que se dirigen a mi, a mi persona, a mi interior, y en otra me omiten y me apostrofean para pasar a ser “educados” pero desconectados de lo interno…
Felíz semana de significados y significantes!!!
(*)Chuchube: conocida como Paraulata, pajarito que canta mucho y que le gusta las zonas áridas y los cujíes son sus preferidos para posarse a cantar. Lo mencionan en varias canciones: ..y un chuchube modula un cantar….demás está decir que mi abuela es de Carora, “donde los cujíes lloran de dolor”…
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